miércoles, 26 de marzo de 2014

MILL Y MARX





Escrito por Luis Roca Jusmet

 La comparación entre Mill y Marx resulta fecunda si nos alejamos de las escolásticas. Según la escolástica marxista, cuyo representante más potente fue Althusser, Mill representa una ideología y una clase: el liberalismo y la burguesía. Se trataría entonces de desmontarlo en función de un análisis científico de los procesos sociales. Hablaríamos entonces de la lucha de clases en el campo ideológico. Para los liberales Marx es, sencillamente, uno de los teóricos del totalitarismo moderno, En él estarían los gérmenes de las dictaduras comunistas. También hay que decir que los liberales aceptan a regañadientes a Mill. En el inmenso estudio de Lasalle ( ideólogo del partido Popular) dedicado al liberalismo no aparece Mill. También conversando con Antoni Fernández Teixidó, ex-camarada troskysta y hoy dirigente del ala liberal de Convergència Democrática de Catalunya, me decía que Mill no le convencía porque tenía un pie en el liberalismo y otro en la socialdemocracia.
 La mejor es ir al texto y al contexto. Vayamos a lo que dicen y como podemos entenderlos en función del su trayectoria sociobiográfica. Mill procede de la burguesía inglesa. Burguesía no entendida en el sentido estricto de capitalista pero sí de una clase social con capital económico ( ingresos, patrimonio) y sobre todo cultural. Pero una burguesía reformista e ilustrada, que desde su perspectiva elitista que reformar moralmente a la sociedad. Esta reforma moral pasa s sobre todo, por la moral. Una educación que nos enseñe a respetar y ayudar al otro en un sentido utilitarista. Lo útil es lo que beneficia a todos, es lo que nos hace defender la felicidad general. Pero la felicidad general no es otra cosa que la suma de las felicidades individuales. Si todos somos altruistas, todos salimos ganando. Mill es democrático cuando defiende el gobierno representativo y el sufragio femenino. También lo es cuándo propone medidas para evita la formación de oligarquías políticas : libertad de voto de los parlamentarios, sueldo que no sea excesivo, ausencia de privilegios, mandato limitado, control a la financiación de los partidos. Su amiga y después esposa Harriet tuvo mucho que ver en ello.
 Pero lo es menos cuando dice que la democracia es posible en países muy civilizados como Gran Bretaña e imposible en los poco civilizados como la India. O cuando dice que los analfabetos y los que viven de la caridad pública no pueden votar. O que los que tienen más formación cultural deben tener un voto que valga el doble que los que tienen poca formación cultural.

viernes, 14 de marzo de 2014

JOHN STUART MILL : ¿ QUÉ ES LA LIBERTAD ?






 

 Escrito por Luis Roca Jusmet


 John Stuart Mill me parece un filósofo con plena autoridad. El utilitarismo ha sido muy despreciado y quizás la formulación de Mill merezca más atención porque se pueden hacer lecturas más fecundas que la que dice el tópico. Pero el libro que hay que recuperar y que tiene una dimensión mucho más amplia que la del propio utilitarismo es el que tituló Sobre la libertad. Es un texto liberal en el sentido mejor y más noble de la palabra. Es el liberalismo que debería recuperar la izquierda. Debería hacerlo por su potente argumentación contra el totalitarismo y contra la biopolítica.
 Mill queda impresionado por la lectura del libro de Alexis de Tocqueville La democracia en América.  Tocqueville, liberal conservador, plantea una crítica muy seria a la democracia, la de convertirse en una tiranía de la mayoría. Una crítica superficial se escandalizaría : ¿ Es que vamos a defender una tiranía de la minoría cuando no hay consenso ?. Pero el tema es más complejo y Mill lo ve claramente. Se trata de los derechos de las minorías y de las libertades individuales. Las minorías deben tener unos derechos blindados porque de modo contrario serán siempre aplastados por las mayorías. Lo que hay que clarificar es, por supuesto, que le da a un grupo el estatuto de minoría y en segundo lugar como establecemos estos derechos irrenunciables. En el contexto de Mill está claro : se refería a las minorías religiosas. Hoy es más complejo.
 Pero es sobre todo de las libertades individuales que quería hablar. Mill plantea que debe haber un límite que separa el ámbito que corresponde a la vida personal y en el que no puede entrar la sociedad y otro que sería aquel en el que la sociedad debe decidir. Este segundo ámbito es el de la moral y la política. La moral son un conjunto de normas interiorizadas cuya base es el respeto y el reconocimiento del otro como sujeto de derechos. Esta moral debe ser universal y se debe conseguir a través de la educación. la política debe ser, por supuesto, democrática. Entre todos debemos formular las leyes. Las normas morales y las leyes deben ser coincidentes porque van orientadas al mismo objetivo : la felicidad colectiva, único bien común aceptable.